Organizaciones Sociales y víctimas de Nariño buscan incidir en la Ley de Víctimas

Comunicado de prensa. Tumaco, Nariño, marzo 30 de 2011.

Movimientos de víctimas y organizaciones sociales, preparan  la realización del Taller Pacífico Sur, con el objetivo de analizar los alcances y vacíos de la Ley de víctimas -que se debate actualmente en la Comisión Primera del Senado- y presentar sus propuestas y cuestionamientos a esta iniciativa.

Entre los principales objetivos de este Taller, organizado por la Mesa Nacional de Víctimas Pertenecientes a Organizaciones Sociales, la Coordinadora Regional del Pacifico Colombiano, Pastoral Social, con el apoyo de FOS Colombia, entre otros, que se realizará los días 1 y 2 de abril en la Casa “Entrada del Mar” (casa del obispo) en Tumaco,  están los de generar espacios de deliberación para recoger las observaciones y propuestas a la Ley de víctimas, construir una agenda pública ciudadana y lograr una plena y coordinada articulación entre las agendas sociales y ciudadanas.

El Taller busca abrir espacios de incidencia política para que las organizaciones sociales regionales logren participar activamente en el debate legislativo de aprobación de la Ley de Víctimas, emprender sus respectivas evaluaciones sobre la crisis de derechos humanos que se vive al sur occidente colombiano, verificar el cumplimiento de la normas constitucionales vigentes a través de las cuales se garantizan los derechos de las minorías étnicas y las víctimas del conflicto, y participar en el Segundo Encuentro Nacional de Víctimas, que se realizará a finales de abril en la ciudad de Bogotá.

Recientes informes de organizaciones internacionales y ONGs nacionales, dan cuenta de un preocupante incremento en los hechos de violencia -como ejecuciones, masacres, asesinatos de menores de edad, violaciones a mujeres y desplazamientos forzados- que vienen ocurriendo en esta región del país. Así mismo, diversas organizaciones de Derechos Humanos, han alertado sobre la presencia de grupos armados ilegales, especialmente de nuevas estructuras paramilitares, con el fin de apropiarse de estos territorios, en especial, de aquellos que pertenecen históricamente a los pueblos indígenas.

“La mayoría de los indígenas asentados en el departamento de Nariño, como Los Pastos, Inga, Awá, Eperara-Siapidara, Kofán y Quillasingas, afirma que sus comunidades afrontan una sistemática violación de los derechos humanos”.

No es el único sector victimizado. En el mes de febrero del presente año, la Federación Colombiana de Educadores, Fecode, denunció un grave incremento en las amenazas y asesinatos de docentes en el departamento de Nariño. Álvaro Morales, vicepresidente de esta Federación, declaró que durante los últimos meses han muerto tres docentes y se han registrado más de cien amenazas por parte de los nuevos grupos paramilitares, conocidos como Bacrim.  Los maestros denunciaron falta de garantías para el ejercicio su profesión.[1]

Organizaciones criminales, ligadas a los poderes mafiosos, como Nueva Generación (Ong), las Águilas Negras, las Autodefensas Campesinas de Nariño, Los rastrojos, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (Agc), grupo que al parecer comandaba el jefe paramilitar ‘Don Mario’, vienen sembrando el terror en esta región desde hace varios años atrás[2].

El pasado 24 de marzo en un debate de control político, sobre falsas desmovilizaciones de grupos paramilitares en la Cámara de Representantes, el parlamentario Guillermo Rivera, del Partido Liberal, declaró que “en la actualidad, según cifras de organizaciones no gubernamentales, 7 de cada 10 asesinatos en los departamentos de Córdoba y Nariño son atribuibles a las Bacrim, y que en el año 2010, estas organizaciones realizaron más ataques contra población civil que las Farc”[3]

Está realidad, y la trascendencia que tiene para el país, que el proyecto de Ley de Víctimas, logre su objetivo de establecer “un conjunto de medidas judiciales, administrativas, sociales y económicas en beneficio de las víctimas, que permita hacer efectivo el goce de sus derechos a la verdad, la justicia y la reparación, de modo que se reconozca su condición de víctimas y se dignifiquen a través de la recuperación del ejercicio de sus derechos constitucionales” y de la memoria histórica, exige que las comunidades victimizadas, las organizaciones sociales y la sociedad en su conjunto, participen activamente en el debate político, logren visibilizar sus propuestas y ampliar el marco de garantías que ofrece esta iniciativa.

Se calcula  que a estos talleres, asistirán un promedio de 100 personas, habitantes de  varios municipios y corregimientos de la región. También se tiene previsto realizar más adelante, otros talleres en Guapí y Buenaventura.

Delegaciones de los municipios y corregimientos de Acapa, Gualajo, Rio Mejicano, Rescate Las Varas,Veredas Unidas, Rio Rosario, Tablón Salado, Bajo  Mira, La Nupa, Rio Chagüi, Caunapi, Tablón Dulce, Cortina Verde, Alto Mira, Imbillpi Del Carmen, Mosquera, Iscuande, Olaya Herrera, Tola, Charco, Barbacoas, Roberto Payán, Cumbitarra, Policarpa,  Leiva, Cali, Santa Bárbara, y Satinga, han confirmado su participación en el Taller.

Organizaciones invitadas:

ASOCOETNAR, RECOMPAS, COPDICON, ACIESNA, LA UNIPA, FUNVIDA, ASOLINAR, LA MESA DE POBLACIÓN DESPLAZADA, COMISIÓN. VJP, PASTORAL FRONTERIZA, PASTORAL SOCIAL (MONSEÑOR GUSTAVO) , RADIO MIRA y          MAPP-OEA

Mayores informes:

José Obregon
3104093218

Janer Castillo
3155273626

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[1] ACNUR; “Bacrim amenazan a docentes en Nariño”. Martes 22 de Febrero de 2011.

[2] En mayo de 2009, cinco jóvenes fueron asesinados y seis más quedaron heridos cuando cerca de 20 hombres armados irrumpieron en una fiesta en el puerto de Tumaco. Las autoridades sospechan que se debió a venganzas entre bandas al servicio del narcotráfico. En otro lugar, cercano a Tumaco, seis personas también fueron asesinadas al parecer por disputas territoriales entre organizaciones al margen de la ley (“Los Rastrojos” y “Las Águilas Negras”). Las víctimas fueron bajadas a la fuerza de un bus intermunicipal por varios hombres armados que bloquearon la vía en cercanías a la vereda Guayacana (municipio de Tumaco). En Cajapí, zona rural del municipio de Tumaco, fueron asesinadas siete personas y cinco más quedaron heridas de gravedad, La masacre, al parecer, fue cometida por el grupo delincuencial “Los Rastrojos”. Ver en:http://www.semana.com/noticias-conflicto-armado/defensoria-preocupada-violencia-narino/123946.aspx

[3]http://www.partidoliberalcolombiano.info/content/%E2%80%9Cbacrim-son-estructuras-no-desmovilizadas-con-justicia-y-paz%E2%80%9D-guillermo-rivera